Jacksonville, Florida - La aplicación de un gorro hipotérmico disminuye significativamente la caída del cabello producida por la quimioterapia. Aunque el gorro hipotérmico podría conllevar algunos efectos secundarios menores, no se ha establecido ninguna relación con efectos secundarios graves.  Algunas personas cuestionan si los gorros hipotérmicos impedirían a la quimioterapia llegar a las células cancerosas en el cuero cabelludo, pero parece que ese riesgo es bajo.

La quimioterapia elimina a las células que se dividen rápidamente, como es el caso de las células cancerosas; pero la quimioterapia no puede diferenciar entre las células cancerosas y otras células normales que también se dividen rápido, como es el caso de los folículos pilosos. Cuando la quimioterapia ataca a los folículos pilosos, se pierde el cabello.

En algunos casos, la quimioterapia lleva solo al afinamiento del cabello. En otros, en cambio, provoca una calvicie total. Por ejemplo, los estudios han demostrado que muchos de los fármacos que componen la quimioterapia para el cáncer de mama producen una calvicie casi total en la mayoría de las pacientes.

Aunque perder el cabello parezca un sacrificio pequeño para evitar que el cáncer reaparezca, no deja de ser un efecto secundario difícil de aceptar. La calvicie no solamente puede repercutir sobre la autoimagen, sino también ser un constante recordatorio del diagnóstico de cáncer.

La idea de enfriar el cuero cabelludo para evitar la caída del cabello nació hace algún tiempo. El frío constriñe los vasos sanguíneos del cuero cabelludo, lo que disminuye la circulación de sangre hacia los folículos pilosos. Es decir, menos cantidad de la quimioterapia llega a los folículos pilosos. Además, el frío vuelve menos activas a esas células, por lo que la quimioterapia no apunta contra ellas tan rápidamente.

Antes, se solía enfriar el cuero cabelludo durante la quimioterapia con compresas frías o con gorros mantenidos en hielo seco que debían cambiarse frecuentemente para conservar baja la temperatura. Sin embargo, en el año 2015, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos autorizó un nuevo tipo de gorro hipotérmico para reducir la caída del cabello en las personas que reciben quimioterapia.

Los nuevos gorros tienen un líquido frío que circula por ellos y están conectados a un computador que mantiene su temperatura en alrededor de 0 grados Celsius (32 grados Fahrenheit). Los gorros también tienen una cubierta que los sostiene en el puesto y ayuda a conservar una temperatura estable.

Un estudio reciente examinó los efectos de los nuevos gorros hipotérmicos en mujeres que recibían quimioterapia para cáncer de mama en etapa inicial. De todas las que usaron constantemente el gorro enfriado a 0 grados (32º F) por 30 minutos antes de la quimioterapia, durante toda la sesión de la quimioterapia y por 90 a 120 minutos después, el 66 por ciento perdió la mitad del cabello o menos. Ese resultado se comparó frente a otro grupo que también recibió quimioterapia, pero no usó los gorros. Todas esas pacientes perdieron más de la mitad del cabello.

El estudio observó varios efectos secundarios menores, tales como escalofríos, dolores de cabeza, irritación del cuero cabellludo y molestias en el cuello y los hombros. De las más de 100 mujeres del grupo con gorros hipotérmicos, solo tres dejaron de usarlo durante el estudio debido a que les producía demasiado frío.

Algunos proveedores de atención médica se mostraron inquietos respecto a que la terapia con gorro hipotérmico pudiera impedir a la quimioterapia llegar a las posibles células cancerosas del cuero cabelludo y, por ello, disminuiría el efecto de la quimioterapia. No obstante, los informes acerca del aparecimiento de cáncer en el cuero cabelludo de quienes usaron los gorros hipotérmicos son bastante raros. No obstante, es necesario investigar más para entender claramente los posibles riesgos.

Otra consideración acerca de los gorros hipotérmicos es el costo. Hasta el momento, algunos seguros de salud no cubren el costo de la terapia con gorro hipotérmico. Si usted piensa usar un gorro hipotérmico mientras recibe quimioterapia, primero consulte con su seguro de salud para ver si su póliza cubre el costo o si tendrá que pagarlo de su propio dinero. La terapia con gorro hipotérmico, normalmente, cuesta alrededor de 400 dólares por sesión.

Dra. Saranya Chumsri, Oncología Médica de Mayo Clinic en Jacksonville, Florida.