Scottsdale, Arizona - La liposucción consiste en la extracción permanente de las células grasas. Sin embargo, la liposucción no garantiza que la estabilidad del peso sea permanente con el tiempo, puesto que todavía se puede subir de peso. Aunque las células grasas no pasen a ningún lado, cuando una persona sube de peso después de la liposucción, es posible que otras áreas del cuerpo no afectadas por el procedimiento crezcan más que en otros períodos de gordura.
El término médico para la liposucción es lipectomía asistida por succión. El procedimiento quirúrgico extrae los depósitos grasos de áreas específicas del cuerpo, como el abdomen, las caderas, los muslos, los brazos o el cuello. Los adultos tenemos una cantidad fija de células grasas en el cuerpo, las cuales se achican o agrandan a medida que uno gana o pierde peso. La cantidad de células grasas no cambia, por lo que la extracción de los depósitos grasos, con las respectivas células grasas que los componen, es permanente y su efecto también lo es.
La liposucción puede afectar la apariencia de la piel en la zona del procedimiento. Por ejemplo, cuando hay hoyuelos en un área, estos pueden empeorar después de la liposucción, e incluso es posible que aparezcan anomalías en la piel como resultado de la liposucción aunque no haya habido ninguna notoria antes del procedimiento. Además, la liposucción no mejora la apariencia de las irregularidades de la piel, como las estrías.
Después de la liposucción, la piel se amolda a la nueva figura de la zona tratada. Algunas áreas de la piel se encogen mejor que otras a fin de ajustarse al nuevo volumen graso del área, lo cual puede repercutir sobre la apariencia de la piel. Cuando la elasticidad y el tono de la piel son buenos, la apariencia de esta probablemente sea lisa; sin embargo, cuando la piel no tiene buena elasticidad, las áreas tratadas posiblemente luzcan sueltas.
Antes de proseguir con la liposucción, es importante que un cirujano plástico capacitado y con experiencia realice una evaluación minuciosa que incluya una atenta valoración de la calidad y la apariencia de la piel en el área a tratarse. Según los resultados de dicha evaluación, el cirujano podrá ofrecer una mejor idea de cómo afectará el procedimiento a la piel.
Si la persona sube de peso después de la liposucción, la manera en la que el cuerpo almacena la grasa y la distribución de la misma por todo el cuerpo será diferente a como era antes. Las células grasas no se regeneran en el área de la liposucción y tampoco pasan a otra zona del cuerpo; pero dado que existe solo una limitada cantidad de células grasas donde el cuerpo puede almacenar la nueva grasa, la ganancia de peso tal vez haga que algunas zonas crezcan más que en otros períodos de gordura y, por lo tanto, den la apariencia de que la grasa pasó a otro lado.
Tenga presente que la liposucción es un procedimiento estético destinado a mejorar la apariencia de ciertas áreas del cuerpo y no sirve como método para adelgazar ni como alternativa a las estrategias sanas para bajar de peso, tales como hacer ejercicio con regularidad y alimentarse sano.
Por último, tenga cuidado respecto a qué proveedor de atención médica consulta para la liposucción. Algunas instituciones ofrecen la liposucción y otros procedimientos estéticos sin la supervisión de un médico calificado… ¡evítelas! Si está considerando la liposucción, la mejor alternativa es recurrir a un cirujano plástico debidamente acreditado y hacerlo en una organización médica respetable.
Dra. Alanna Rebecca, Cirugía Plástica y Reconstructiva de Mayo Clinic en Scottsdale, Arizona.