Scottsdale, Arizona - Mayo Clinic ofrece atención a los pacientes preocupados por viajar a lugares ubicados a gran altura en la recientemente establecida Clínica médica para entornos de gran altitud y severos.
“La intención es servir a los pacientes que necesitan viajar, sea por negocios o por placer, a entornos de gran altitud”, explica el Dr. Jan Stepanek, médico que preside la División de Medicina Preventiva, Ocupacional y Aeroespacial de Mayo Clinic en Arizona.
El mal de altura puede ocurrir cuando el cuerpo humano no se aclimata adecuadamente a los niveles bajos de oxígeno de las grandes elevaciones. Los síntomas comunes son de falta de aire, dolor de cabeza, náusea y problemas gastrointestinales. Otros problemas más graves pueden incluir a los mortales edemas cerebral y pulmonar (es decir, la hinchazón del cerebro y el exceso de agua en los pulmones).
“Se trata de personas que no pueden funcionar tan bien como los demás a gran altitud. Sea por disposición, problemas de salud preexistentes o la rápida naturaleza del ascenso, no logran adaptarse bien en un entorno de gran altitud”, añade el Dr. Stepanek.
La clínica se enfoca principalmente en los viajeros a quienes les inquieta un ascenso a climas que superan los 2400 metros (8000 pies). Otros aspectos de la clínica se enfocan en la naturaleza aislada de los entornos austeros de gran altitud, lo que incluye menor cantidad de oxígeno, condiciones de frío extremo, escasez de alimentos seguros y de fuentes de agua, así como limitados recursos de atención médica.
El Dr. Stepanek, oriundo de Suiza y cuyo interés en este ámbito de la medicina nació mientras se encontraba estacionado en las montañas y prestaba sus servicios en la milicia suiza, dice que los viajes modernos han acelerado la necesidad de brindar más atención a los problemas de salud a gran altitud.
“La capacidad de viajar rápidamente a lugares de altitud, sea en vehículo o aeronave, le roba al cuerpo la oportunidad de aclimatarse gradualmente como sucedería al caminar hasta esa altura. En realidad, ese ha sido el factor principal que ha convertido esto en un problema médico más común, comparado frente a épocas pasadas”, explica el Dr. Stepanek.
A través de una preselección basada en el historial médico personal, la altitud a alcanzar y la velocidad del ascenso del paciente a dicha altura, el equipo clínico de Mayo determina quiénes tienen riesgo bajo, moderado o alto. Como parte del programa, se les instruye sobre la aclimatación previa, el reconocimiento de los síntomas, las pruebas personalizadas y acerca de las prescripciones y los estuches médicos que pueden prevenir o tratar problemas de salud a gran altitud. El equipo de Mayo persigue activamente la investigación basada en el laboratorio sobre el rendimiento humano y está compuesto por médicos clínicos con experiencia en grandes altitudes, como el Dr. Bruce Johnson (doctor en investigación) y los miembros del personal clínico que han participado en expediciones investigativas a los montes Everest, Aconcagua y Kilimanjaro.
La Clínica médica para entornos de gran altitud y severos funciona en el Edificio Mayo Clinic de Scottsdale. El Dr. Stepanek está disponible para entrevistas.