Rochester, Minnesota - Los médicos que reciben comentarios negativos por internet no obtienen las mismas respuestas en los sondeos rigurosos que se llevan a cabo para conocer la satisfacción de los pacientes, según informa un nuevo estudio de Mayo Clinic Proceedings. No obstante, al compararlos frente a otros colegas sin comentarios negativos, estos médicos obtuvieron puntajes menores en algunos factores que van más allá de su interacción con los pacientes y de su control directo.
“El estudio resalta la desconexión entre los puntajes avalados por la industria sobre la satisfacción de los pacientes y los comentarios por internet. Los pacientes deben estar conscientes de esa distinción al tomar decisiones acerca de su salud y, por su parte, los médicos también necesitan estar conscientes del asunto para controlar su reputación por internet”, comenta la Dra. Sandhya Pruthi, médica internista en Mayo Clinic y autora experta del trabajo.
Los comentarios por internet acerca de los médicos se han convertido en un recurso conocido por los pacientes para buscar información acerca de sus alternativas médicas, pues uno de cada seis médicos es calificado. Este estudio es el primero en comparar los datos de médicos con comentarios negativos por internet y los de médicos sin comentarios negativos.
En un estudio piloto realizado entre los meses de septiembre y diciembre de 2014, los investigadores aplicaron las búsquedas y las advertencias de Google para rastrear los comentarios por internet negativos sobre los médicos de la sede de Mayo Clinic en Rochester. De los 2148 médicos estudiados, 113 recibieron comentarios por internet negativos. Esos médicos representaban a 28 departamentos y divisiones.
Luego, los investigadores compararon los puntajes obtenidos por estos médicos en un sondeo oficial sobre la satisfacción de los pacientes frente a los de otros médicos de Mayo Clinic y áreas similares, pero que no habían recibido comentarios por internet negativos. Los investigadores no descubrieron diferencias estadísticas en los puntajes generales, ni en los puntajes acerca de la comunicación, ni la interacción con los pacientes.
No obstante, el grupo con comentarios negativos obtuvo puntajes menores en algunos factores que van más allá de la interacción entre médico y paciente. Entre esas variables estuvieron: interacción con el personal del mostrador, personal de enfermería, entorno físico, accesibilidad a citas, tiempo de espera, resolución de problemas, facturación y estacionamiento. Los datos no indican ni la circunstancia específica ni la experiencia personal del paciente que llevaron al comentario negativo.
Los investigadores reconocen las limitaciones del estudio, tales como: un grupo muy pequeño de médicos; el período para la recolección de datos fue limitado y solamente se usó un buscador por internet; y, los comentarios por internet reflejaban una sola experiencia de los pacientes.
En un editorial publicado en la misma edición de Mayo Clinic Proceedings, el Dr. Bradley Leibovich, médico urólogo Mayo Clinic, dice que este estudio brinda mensajes oportunos para los pacientes que tienen reclamos, para los pacientes que buscan información, para los proveedores de atención médica y, por último, para las organizaciones de la salud.
“Estos resultados subrayan la totalidad y la integridad de los procesos, los elementos y los encuentros, no solamente de la interacción entre el paciente y el proveedor de atención médica, y todo debe funcionar de manera eficiente y cohesiva para garantizar el máximo bienestar y la mejor experiencia para el paciente”, expone el Dr. Leibovich.
Además de la Dra. Pruthi, el primer autor del trabajo es el Dr. Robert Widmer, mejor conocido como R. Jay y médico que se especializa en cardiología intervencionista en Mayo Clinic. Los investigadores informan que no recibieron ningún apoyo económico ni tienen ningún conflicto de intereses.