Jacksonville, Florida - Un equipo clínico de la sede de Mayo Clinic en Florida es el primero en ofrecer a cuatro pacientes que padecían incontinencia fecal desde hace mucho tiempo un nuevo tratamiento potencialmente duradero, que consiste en una pequeña cinta de cuentas imantadas de titanio entrelazadas en una cuerda de titanio que imita con éxito la función del esfínter anal.
Por ahora, Mayo Clinic es el único centro médico que ha implantado quirúrgicamente con éxito este dispositivo, conocido como sistema FÉNIX para recuperar la continencia. En diciembre de 2015, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, autorizó el sistema bajo la exención de dispositivo humanitario, proceso que requiere la autorización de la junta de revisión institucional (IRB, por sus siglas en inglés) de un hospital para uso en pacientes. La IRB de Mayo Clinic es la primera y, hasta el momento, la del único centro en autorizar el empleo de este dispositivo.
El problema de la incontinencia fecal, o fuga accidental de heces, no es algo raro. Puede afectar a más de 20 por ciento de las mujeres de más de 45 años, dice el Dr. Paul Pettit, especialista en medicina pélvica femenina y cirugía reconstructiva de Mayo Clinic. “La afección puede ser debilitante por el aislamiento social, la depresión y la pérdida de autoestima y autoconfianza que ocasiona.
“Hasta ahora, cuando una paciente no mejoraba con técnicas menos invasivas, la única alternativa era la colostomía; en cambio hoy, este dispositivo ofrece una nueva alternativa que recupera la función y estamos contentos de poder ofrecerlo”, explica el Dr. Pettit, quien realizó las cuatro operaciones.
La atracción magnética entre las cuentas devuelve al dispositivo FÉNIX (mostrado abajo) a la posición cerrada para evitar que el canal anal se abra inesperadamente y eso lleve a una fuga accidental de las heces.
Dispositivo FÉNIX en posición cerrada
La operación misma dura alrededor de 45 minutos y requiere permanecer en el hospital una noche.
La incontinencia fecal es un síndrome que implica la pérdida no intencionada de heces sólidas o líquidas. La mayoría de pacientes que la padece son mujeres y la causa, a menudo, es dar a luz, cuando los músculos y nervios alrededor del año sufren daños durante el parto, añade el Dr. Pettit.
Al implantar el sistema, se coloca la cuerda de cuentas imantadas de titanio alrededor del canal anal en posición cerrada. El aumento de la presión dentro del abdomen abre las cuentas y permite el paso de las heces; luego, los imanes se cierran espontáneamente.
El dispositivo funciona de inmediato después de la cirugía y no requiere ninguna activación por parte de la paciente ni ajustes por parte del médico, dice el fabricante, Torax Medical Inc., de St. Paul, Minnesota.
Otros científicos y médicos clínicos de Mayo que trabajaron con el Dr. Pettit en la aplicación clínica del sistema fueron la Dra. Heidi Chua, la Dra. Anita Chen y el Dr. Chris DeStephano.