Rochester, Minnesota - La aplicación de la ayuda para tomar decisiones conjuntas, que involucra más a los pacientes en las decisiones respecto a su propio cuidado médico, puede evitar las hospitalizaciones innecesarias y los exámenes cardíacos avanzados en los pacientes que informan dolor en el pecho de bajo riesgo con tan solo invertir aproximadamente un minuto de tiempo, dice un estudio realizado por los investigadores de Mayo Clinic y publicado electrónicamente hoy en The BMJ.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, la segunda causa principal de las visitas al departamento de emergencia es por dolor en el pecho.
“El dolor en el pecho puede ser producto de una amplia variedad de problemas. Si bien se recomienda a la gente buscar ayuda médica de inmediato ante un dolor en el pecho, los pasos posteriores varían y pueden ser innecesariamente costosos”, dice el Dr. Erik Hess, autor principal del estudio y médico de medicina de emergencia en Mayo Clinic.
Los pacientes con bajo riesgo para síndrome coronario agudo (compuesto por una gama de afecciones, como el ataque cardíaco, y relacionadas con muerte súbita) a menudo ingresan al hospital para observación y exámenes cardíacos. El Dr. Hess y sus colegas dicen que eso se debe a que “dada la posibilidad de pasar por alto el diagnóstico de un síndrome coronario agudo, los médicos clínicos mantienen muy bajo el umbral de ingreso al hospital de los pacientes para observación y exámenes cardíacos avanzados”.
“A pesar de la pequeña posibilidad de que estos pacientes de bajo riesgo sufran un síndrome coronario agudo, los médicos de emergencia son más proclives a ingresar por omisión al paciente para observarlo y realizarle más análisis. Eso representa una gran carga y un gasto innecesario para el paciente y el sistema de atención médica”, señala el Dr. Hess.
La opinión del equipo investigativo fue que un método para tomar decisiones conjuntas podría no solo mejorar el entendimiento del paciente respecto a los síntomas y los riesgos, sino también permitir que participen más activamente en la decisión de si realmente es necesario ingresar al hospital y realizarse exámenes cardíacos avanzados.
Ensayo sobre la ayuda para tomar decisiones
Gracias a la ayuda para tomar decisiones respecto al dolor en el pecho, tanto el médico del departamento de emergencia como el paciente con dolor en el pecho de bajo riesgo pueden calcular el riesgo de sufrir un síndrome coronario agudo dentro de los siguientes 45 días. En base a ese riesgo, pueden luego conversar acerca de si se justifica ingresar al hospital y realizar exámenes cardíacos avanzados o si lo más apropiado es una cita de seguimiento con el médico de cabecera o con el cardiólogo.
En un ensayo clínico aleatorio realizado en seis departamentos de emergencia, los investigadores compararon la atención médica normal de 447 pacientes en quienes se intervino con las ayudas para tomar decisiones respecto a las alternativas para un dolor en el pecho. El resultado principal, seleccionado por los pacientes y los representantes de los cuidadores, fue el conocimiento del paciente. Los resultados secundarios fueron: la participación en la decisión de ingresar al hospital, la proporción de pacientes ingresados para exámenes cardíacos y la tasa de un gran evento cardíaco en 30 días.
Ventajas y ahorros
El equipo demostró que la aplicación de las ayudas para tomar decisiones llevó a que:
- El paciente tenga más conocimiento al respecto (con la respuesta a un grupo de 8 preguntas).
- Los pacientes se involucren más en la toma de decisiones (con la aplicación de la escala OPTION).
- Una gran cantidad de pacientes pueda valorar correctamente su propio riesgo de sufrir un síndrome coronario agudo en 45 días, dentro de un 10 por ciento (65 por ciento frente a 18 por ciento de los casos).
- La frecuencia de los ingresos para observación disminuyera (37 por ciento frente a 52 por ciento).
- Más pacientes opten por realizarse otros exámenes cardíacos en la consulta externa (30 por ciento frente a 17 por ciento).
Los pacientes y los médicos se mostraron satisfechos con las ayudas para tomar decisiones y con su aplicación, que según dicen los autores del estudio, “requirió apenas un minuto del tiempo del médico”. Tomar las decisiones conjuntamente condujo a muchas menos hospitalizaciones y exámenes cardíacos avanzados, lo que redujo la carga general sobre el sistema de atención médica, así como los posibles costos para el paciente.
“Cuando se involucra a los pacientes en las decisiones sobre su atención médica, es más probable que reciban el cuidado correcto para sus problemas. Creemos que las ayudas para tomar decisiones respecto a las alternativas para el dolor en el pecho facilitarán tanto la conversación entre pacientes y médicos como la preparación de un plan médico personalizado con menos probabilidad de consumir excesivamente los servicios de salud”, acota el Dr. Hess.
Otros autores del trabajo son:
- Dr. Judd Hollander, médico de la Universidad Thomas Jefferson
- Dr. Jason Schaffer, médico de la Universidad de Indiana
- Dr. Jeffrey Kline, médico de la Universidad de Indiana
- Dra. Deborah Diercks, médica de la Universidad Suroccidental de Texas
- Dr. Russell Jones, médico de la Universidad de California en Davis
- Dra. Kelly Owen, médica de la Universidad de California en Davis
- Dr. Zachary Meisel, médico de la Escuela de Medicina Perelman de la Universidad de Pennsylvania
- Dr. Jeph Herrin, doctor en investigación de la Escuela de Medicina de Yale y del Fideicomiso para Investigación sobre la Salud y la Educación
- Dra. Ana Castañeda Guarderas, médica de Hospital y Centro Médico Aventura
- Michel Demers de Mayo Clinic
- Jonathan Inselman de Mayo Clinic
- Dra. Annie LeBlanc, doctora en investigación de Mayo Clinic
- Dr. Víctor Montori, médico de Mayo Clinic
- Dr. Nilay Shah, doctor en investigación de Mayo Clinic
- Dr. Carlos Torres, doctor en medicina e investigación de Mayo Clinic
El Dr. Hess presentó por primera vez las ayudas para tomar decisiones respecto a las alternativas para el dolor en el pecho durante la 65 reunión científica anual del Colegio Americano de Cardiología (Lea el comunicado de prensa). El estudio contó con el financiamiento del Instituto para Investigación de Resultados Centrados en el Paciente y del Centro Robert D. y Patricia E. Kern para la Ciencia de Brindar Atención Médica de Mayo Clinic. Su conducción se realizó en colaboración con la Unidad para Investigación sobre Conocimiento y Evaluación, que enfoca la mayor parte de sus esfuerzos en el desarrollo y la validación de las ayudas para tomar decisiones en toda la atención médica.