Rochester, Minnesota - Uno de cada diez pacientes que acude al hospital con el tipo más grave de ataque cardíaco tiene antecedentes de cáncer, lo que revela la aparición de un subgrupo de pacientes cardíacos, dice un estudio de Mayo Clinic publicado en Mayo Clinic Proceedings. El estudio también descubrió un riesgo triple de muerte no cardíaca en estos pacientes, pese a que su riesgo cardíaco no era mayor ni al sufrir el ataque cardíaco agudo ni durante el seguimiento a largo plazo.

Los científicos llevaron a cabo un estudio retrospectivo de cohorte con 2346 pacientes atendidos en Mayo Clinic de Rochester debido a un infarto de miocardio por elevación del segmento ST, que es el ataque cardíaco más grave. El estudio retrospectivo cubrió un período de 10 años, a partir del año 2000, cuando se introdujo en la práctica clínica los tipos de estent más novedosos y actuales. Los pacientes recibieron seguimiento de sus resultados agudos o a largo plazo durante un promedio de seis años.

“En los últimos 25 años, hemos visto aumentar la supervivencia del cáncer, lo que pese a ser magnífico, ha conducido a nuevos retos (como el manejo de las enfermedades posteriores y los efectos secundarios), hasta un punto nunca antes alcanzado. En particular, como cardiólogos deseamos saber si el cáncer y sus terapias dejan a estos pacientes debilitados desde el ángulo de la enfermedad cardiovascular”, comenta el Dr. Joerg Herrmann, autor experto y cardiólogo intervencionista en Mayo Clinic.

Otros resultados del estudio son los siguientes:

  • Los pacientes con antecedentes de cáncer llegan al hospital más a menudo con choque cardiogénico, en el cual el corazón repentinamente no logra bombear suficiente sangre. Además, se someten con mayor frecuencia a la terapia con globo de contrapulsación intraaórtica, dispositivo que se introduce para ayudar al corazón a bombear sangre, y posiblemente muestran una disminución en la reserva cardíaca.
  • Los pacientes con antecedentes de cáncer, pese a que llegan al hospital más enfermos, no tienen una tasa de muerte cardíaca mayor. “Eso indica que la angioplastia para un ataque cardíaco agudo es igual o más provechosa en estos pacientes”, anota el Dr. Herrmann.
  • Los pacientes con antecedentes de cáncer tienen una posibilidad significativamente mayor de morir en el hospital debido a motivos no relacionados con el corazón, pese a llegar al hospital con un ataque cardíaco agudo.
  • Los pacientes diagnosticados dentro de los seis meses previos al ataque cardíaco corrieron el mayor riesgo de muerte en el hospital (siete veces más) después de la angioplastia, pero la razón no es clara, dice el Dr. Herrmann.
  • Los pacientes con antecedentes de cáncer tienen un riesgo bastante mayor de ser hospitalizados debido a insuficiencia cardíaca durante el seguimiento. No obstante, con el tratamiento médico óptimo, no aumenta el riesgo de morir debido a enfermedad cardíaca. Los investigadores descubrieron que estos pacientes terminan falleciendo debido al cáncer.

“Este estudio sustenta la importancia de que tanto los cardiólogos como los oncólogos trabajen conjuntamente en el cuidado de estos pacientes. Queda claro que el objetivo es que los pacientes oncológicos de hoy no se conviertan en los pacientes cardíacos del futuro y que de hacerlo, se les ayude a superarlo de forma integral”, añade el Dr. Herrmann.

Este concepto de atención médica, que se ha dado a conocer como “cardio-oncología”, es una disciplina naciente.

Otros coautores de Mayo Clinic son:

  • Dr. Feilong Wang (doctor en medicina)
  • Rajiv Gulati (doctor en medicina e investigación)
  • Ryan Lennon
  • Bradley R. Lewis
  • Jae Yoon Park (doctor en medicina)
  • Gurpreet Sandhu (doctor en medicina e investigación)
  • Scott Wright (doctor en medicina)
  • Amir Lerman (doctor en medicina)